Tradicionalmente, los equipos de Formación y Desarrollo (L&D) han tenido que hacer frente a una gran dificultad: encontrar maneras de demostrar el impacto real de lo que hacen para el negocio. People Management magazine analiza si los cambios generados por la pandemia pueden ser una oportunidad para revertir la situación, mejorar las métricas usadas hasta ahora para medir el impacto formativo y alinear definitivamente el aprendizaje con los objetivos estratégicos.
La evolución de la tecnología pone en jaque al mercado laboral y por consiguiente a los ciudadanos. Para salir de este callejón, aparentemente sin salida, se trabaja desde diversas propuestas que permitan que, pese a la automatización del trabajo, los ciudadanos no pierdan su estatus. En este caso, el país nórdico será el primer país del mundo en experimentar en 2017 esta forma de retribución, que reportará a 2.000 ciudadanos un poco más de 500 euros al mes en un programa que durará dos años.
Parece claro que el desarrollo tecnológico cambiará, más si cabe, el entorno laboral y, por consiguiente, el sistema social que conocemos. Por ello, la propuesta de una Renta Básica Universal es, según los expertos, el motor de un cambio de paradigma en la sociedad. Un cambio de dimensiones al que nos debemos adaptar para no vernos ahogados por la mecanización y automatización de las tareas.