La justicia francesa reconoce la presión ejercida por parte de la compañía France Télécom sobre los trabajadores durante la ola de suicidios de hace una década. En consecuencia, el exconsejero delegado, el número dos y el antiguo director de Recursos Humanos han sido condenados a un año de cárcel y deberán pagar una multa de 15.000 euros.
Un ingeniero francés murió de un infarto tras una noche de sexo con una amante en un viaje de negocios. Ahora, la justicia ha indemnizado a la viuda tras considerarlo un "accidente laboral". El debate está abierto: ¿cuándo termina una jornada de trabajo?
La Fiscalía francesa ha pedido las máximas penas que permite la legislación contra France Télécom y contra su antigua cúpula directiva en el proceso por acoso de empleados, a la que se responsabiliza de múltiples suicidios y tentativas hace una decena de años. Según el relato de la acusación, Lombard y los otros encausados tenían conciencia de las consecuencias de los métodos que aplicaban, a los que recurrieron para poner a los trabajadores bajo presión.
El museo del Louvre cierra de manera inesperada por la baja masiva de sus trabajadores, ante la afluencia multitudinaria y la falta de recursos y refuerzos de personal para atender. En 2018, el museo parisino obtuvo un récord histórico de visitas: 10,2 millones de personas, lo que supone un crecimiento del 25% con respecto al año anterior.
En el banquillo se sientan siete ex altos ejecutivos de la antigua empresa pública gala France Télécom, hoy Orange. Al otro lado, 20 de las 39 víctimas reconocidas de un sistema laboral de maltrato y acoso moral esperan una condena ejemplar. Las 19 restantes, entre 2007 y 2010, decidieron poner fin a su vida debido a la presión sufrida en el trabajo.
Entre 2007 y 2010 una ola de suicidios en la compañía telefónica France Télécom, hoy Orange, puso en entredicho algunos de sus métodos de gestión de personal que tuvieron efectos en la salud mental de los trabajadores. Es por eso que siete de sus exdirigentes comparecen ahora ante el Tribunal Correccional de París bajo la acusación de "acoso moral".
Es una de las grandes preguntas de la economía actual dadas las diferencias abismales entre lo que cobra el promedio de trabajadores y la clase ejecutiva. INSEAD Knowledge, el portal de la escuela de negocios francesa, trata de analizar la situación en un artículo que pone en cuestión algunos mitos como, por ejemplo, que los salarios excepcionales son necesarios para un desempeño excepcional o que son un simple reflejo de las leyes de la oferta y la demanda.
Emmanuel Macron lanza su primera gran reforma económica, clave para determinar el éxito o el fracaso de su mandato, en un país resistente al cambio. Son cinco decretos que flexibilizan la actual legislación laboral, facilitan el despido y pretenden incentivar la contratación dando más poder a las empresas y restando peso a la acción sindical.
La conexión continua mina nuestras relaciones, nuestra creatividad. La hiperconectividad que nos invade se ha instalado sin normas de etiqueta, sin códigos de conducta acordados, sin protocolos, sin tiempo para que procesemos su impacto. Los usos sociales, en ocasiones abusivos, han abierto paso a la necesidad de legislar, como acaba de hacer Francia.
Luis Garicano, catedrático en la London School of Economics; Claire LeLarge, economista en Centre de Recherche en Economie et Statistique de Francia; y John Van Reenen, catedrático de Economía en el MIT: "No podemos aspirar a que España tenga los niveles salariales de nuestro entorno sin que sus trabajadores tengan niveles de productividad similares a las de estos países".
Con el inicio del 2017, las empresas de más de 50 trabajadores en Francia tienen que comenzar a desarrollar las reglas de juego sobre su relación con los trabajadores fuera del horario laboral y la tecnología. Gracias al reconocimiento por ley del derecho a desconectar, empresarios, directivos y asalariados se enfrentan al reto de convivir con unas fronteras cada vez más difuminadas entre la vida laboral y la personal.
Mientras en España sigue el debate sobre salir o no a las seis de la tarde, los franceses han hecho oficial la desconexión por la que no se puede obligar a contestar 'emails' o llamadas fuera del horario laboral, pese a que la tecnología hace cada vez más difícil la desconexión.
¿Qué ocurre en el mundo del trabajo que está destruyendo a tanta gente exhausta por ese agotamiento profesional físico y psíquico que en inglés se conoce como burn out? El síndrome del trabajador quemado se trata de un verdadero problema social en Francia que afecta a todas las categorías profesionales desde que en la década de los noventa se produjera "una intensificación del trabajo".
La nueva reforma laboral que ha levantado "en armas" a huelguistas y sindicatos, incluye un novedoso punto sobre "el derecho a desconectar", posiblemente mucho más apreciado por los ciudadanos que el resto de la ley. El blanco de esta medida son las empresas con 50 o más empleados y pretende impedir que los trabajadores reciban correos electrónicos fuera de la oficina, una situación que crea estrés laboral o burn-out, investigado ahora por expertos franceses como una posible enfermedad, e impide la conciliación.
Un joven francés, harto de negativas, decidió postularse para un trabajo mediante una arriesgada estrategia y logra captar la atención del personal de selección: eliminar todo las partes superfluas de su carta de presentación y sustituirlas por 'blablablas'.
Jonathan y Marine son una pareja francesa que podrá cuidar de su hija Naëlle que sufre un cáncer de riñón mientras dure el tratamiento, gracias a la ayuda de sus compañeros de trabajo, quienes les han cedido 350 días de sus vacaciones. En Francia una ley de 2014 permite que los trabajadores puedan ceder días de vacaciones a un compañero si los superiores lo aprueban.
Tras los altercados recientes que han afectado a la aerolínea francesa se han reanudado las negociaciones con el objetivo de poner fin a las pérdidas que sufre la compañía. Sin embargo tanto sindicatos como empresa se culpan mutuamente de la falta de acuerdo sobre la aerolínea, cuya crisis está dañando la imagen de Francia.
Un grupo de trabajadores de Air France consegue burlar las medidas de seguridad y penetrar en la sede de la compañía en el aeropuerto Charles de Gaulle de París donde se celebraba una reunión entre la dirección y los sindicatos por el plan de ajuste para 2.900 personas.
Gabriela Cañas: "La ley ofrece, critican los conservadores, una imagen nefasta a los inversores de un país poco trabajador. Lo cierto es que una norma pensada para generar empleo no ha evitado que Francia registre hoy su mayor tasa de paro de su historia reciente: 10,5%."
Según The New York Times, más de una década después de haber sido introducida, la semana laboral de 35 horas sigue proyectando una imagen de Francia como uno de los lugares más relajados del mundo para trabajar. Pero, en realidad, la semana de 35 horas se ha convertido en algo mayormente simbólico, ya que cada vez más empleados trabajan más horas y de modo más intenso, con una productividad un 13% superior a la media de la eurozona.
La lucha contra la obsolescencia programada puede conseguir a corto plazo un éxito en la Europa en el futuro o un velado varapalo. El Parlamento francés ha aprobado castigar con penas de hasta dos años de prisión y multas de 300.000 euros a las empresas que, con la excusa de las leyes del mercado y la supervivencia empresarial, violen las leyes de defensa del consumidor.
Las compañías de más de cien empleados deberán promover también el transporte público. Entre las actuaciones previstas en un ambicioso proyecto de Transición Energética del gobierno francés, se incluye facilitar a las empresas que abonen dinero a sus empleados por utilizar la bicicleta para acudir al trabajo, a razón de 25 céntimos el kilómetro, aproximadamente, si bien aún no se ha fijado el precio. A cambio, esas empresas verán reducidas sus cotizaciones sociales.
El Gobierno francés ha puesto en marcha un programa para incentivar el transporte sostenible. Tras varios meses barajándose, se ha puesto en práctica una idea que ya se aplica en otros países de la UE: una ayuda económica para los trabajadores que vayan al trabajo en bici.
Los españoles y los irlandeses están entre los europeos a los que más les gustaría alargar su vida laboral, es decir, jubilarse más tarde, en contraste con los franceses, que tienen menos interés en trabajar más años.
Todos los países de Europa abordan reformas legales al objeto de aplazar la edad de jubilación. En España, que se apresuró a retrasarla de 65 a 67, se empiezan a oír voces que proponen llevarla hasta los 70, algo inédito en la mayoría de países y que ha causado revuelo sindical.
El presidente francés ensaya el principio nórdico de la "flexiseguridad". El problema de fondo ha residido hasta ahora en la rigidez y dualidad del mercado laboral, enormemente protector para quienes tienen un trabajo estable y penalizador para todos los demás, condenados a alternar empleos temporales y precarios con temporadas en el paro.
El presidente del grupo estadounidense Titan escribió una carta virulenta y polémica carta al ministro de Recuperación Industrial francés Montebourg en la que rechazaba hacerse cargo de una planta de la fábrica Goodyear. En su mensaje dijo que después de varias visitas había visto que los franceses trabajaban muy poco y que los sindicatos estaban “locos”.
En la línea de buscar empleo a través de soluciones radicales y poco convencionales triunfan en la Red las historias laborales diferentes, como la de un francés que ha creado su currículo inspirándose en el portal Amazon y ya cuenta con 3.000 visitas diarias.
La Justicia francesa ha decidido imputar a France Télécom en la causa que investiga los 35 suicidios que se produjeron en la plantilla de la compañía entre 2008 y 2009. El ex presidente de la compañía, Didier Lombard, también está imputado en el caso.