Los funcionarios ya han comenzado a hacer uso de los beneficios del plan Concilia, que comenzó a funcionar el pasado 1 de enero y que pretende que el medio millón de empleados públicos de los ministerios puedan compaginar su trabajo con su vida familiar.

La subsecretaria del Ministerio de Administraciones Públicas, María Dolores Carrión, aseguró ayer que son más de 1.500 los permisos de paternidad, lactancia y atención a personas dependientes solicitados desde el 1 de enero. El departamento no ha ofrecido datos desglosados de cuántos funcionarios han pedido los diferentes beneficios.

Carrión realizó estas declaraciones en un coloquio celebrado en el Club Siglo XXI, en el que también participó el presidente de la Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles, Ignacio Buqueras. Carrión afirmó que la productividad debe medirse por los resultados de los trabajadores y no por su presencia en el lugar de trabajo; declaró que espera que sean "muchos los que copien" la aplicación del Plan Concilia.

Este plan consiste, entre otras medidas, en un permiso de paternidad de 10 días, la extensión de permiso de maternidad cuatro semanas a costa de acumular las horas de lactancia y licencias para cuidar a familiares dependientes.

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