Se cumplen estos días 100 años del inicio de la Expedición Imperial TransAntártica Británica (1914-1917) que tuvo por objetivo realizar la primera travesía continental de la Antártida. Un periplo de extremo agotamiento, hambre y frío para una tripulación perdida en su suerte pero liderada magistralmente por Sir Ernest Shackleton. En el nuevo escenario actual se requieren líderes como Shackleton, que sepan navegar en la incertidumbre y no se naufraguen en aguas turbulentas.
Resumen:
“Se buscan hombres para un viaje peligroso, sueldo bajo, frío intenso, largos meses de completa oscuridad, peligro constante, dudoso regreso sano y salvo, honor y reconocimiento en caso de éxito”, con ese anuncio publicado en la prensa británica, Ernest Shackleton completó una tripulación para afrontar la hazaña de alcanzar la Antártida. Su historia ha significado un ejemplo paradigmático de liderazgo al límite que el autor Dennis N.T. Perkins, PhD., desgranó en su obra ‘Lecciones de Liderazgo’. Hoy analizamos su persona como ejemplo para afrontar entornos complejos u límites.
Publicado en el número 295 de la revista, de febrero de 2015.