Escoger hasta el 30% de tu salario en productos y servicios es el aliciente que justifica el auge de la retribución flexible en la mayoría de las organizaciones. La comunicación es una de las patas que justifican el éxito de la retribución flexible y, según un informe, es el correo electrónico el canal que los empleados prefieren para saber los productos o servicios a los que pueden acceder.
La Comisión Europea celebra el Día por la Igualdad Salarial el 2 de noviembre, la fecha en que las mujeres dejan de cobrar por comparación con el sueldo de los hombres. La brecha salarial entre hombres y mujeres apenas ha variado en los últimos años, manteniéndose cercana al 16 %.
El filósofo y pedagogo José Antonio Marina, a quien Méndez de Vigo ha encargado el 'Libro blanco de la función docente', defiende relacionar el sueldo del maestro con la evolución de sus alumnos, la evaluación de su trabajo en el aula y lo que consigue su centro.
Raymond Torres, Director del servicio de estudios de la OIT: "Un débil crecimiento de la productividad limita el espacio para aumentar los salarios, el empleo estable y la inversión productiva. La remuneración media por hora trabajada está un 30% por debajo de los países europeos más productivos. Y el diferencial se está ampliando."
Manuel Castells, Catedrático de sociología en la Universitat Oberta de Catalunya: "La crisis ha acentuado la desigualdad y la polarización en todos los países, y particularmente en Europa y en Estados Unidos, donde se inició. No había un tal nivel de desigualdad en el mundo desde hace un siglo."
Desde la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME) han puesto en marcha esta guía, descargable gratuitamente, producto de una investigación que sostiene que en España las diferencias en materia de desigualdad entre hombres y mujeres se está reduciendo. Para su elaboración se ha contado con la participación a través de encuestas de 500 pymes, a las que se les ha preguntado sobre sus prácticas en materia de igualdad y conciliación.
Según un informe de Randstad, el 27% de las empresas ha subido la retribución a los trabajadores en el último año y se prevé que la cifra crezca en 2016, sobre todo en aquellas profesiones donde la oferta es superior a la demanda. Pero el sueldo no es lo único importante, pues los profesionales valoran también el tipo de proyecto o la capacidad de desarrollo en la empresa.
John Müller: "Desigualdad no siempre significa injusticia. De hecho, todos tenemos estaturas distintas y nadie pide igualdad en eso. En cuanto a remuneraciones, el concepto clave es equidad, que supone dar a cada uno lo suyo, según sus merecimientos, y no discriminar a dos sujetos que rinden igual."
La aparición de nuevas funciones dentro de la empresa relacionadas sobre todo con la tecnología y el big data complica la tarea de definir y ajustar la compensación para hacerla competitiva y justa para todos los niveles. Workforce Magazine habla sobre los analistas de compensación, quienes deben estudiar el mercado a nivel global y las características específicas de los diferentes trabajos con el objetivo de establecer paquetes retributivos adecuados a las funciones emergentes en la actualidad.
A la hora de elegir una empresa, los candidatos valoran, además de la remuneración económica, el proyecto, el tipo de compañía o la estabilidad. Las empresas quieren trabajadores que sean innovadores y generen valor, incluso de otros sectores. Muchos profesionales quieren cambiar de empresa por la escasa motivación de su firma durante la crisis.
A pesar de que las estadísticas oficiales señalan que la brecha salarial por género es una realidad y que las mujeres cobran un 14% menos que sus homólogos masculinos, los jóvenes menores de 25 años no son conscientes de que dicha brecha exista, debido a su falta de conocimiento del mercado laboral.
Compañías como Amazon han establecido canales a través de los que los trabajadores pueden aportar 'feedback' anónimo sobre sus colegas. Los superiores toman éstos y otros datos para su evaluación final.
Según un estudio anual de Mercer, se están implantando en las empresas cambios en las formas de retribución según el cumplimiento de los objetivos y la consecución de los resultados, así como la creación de nuevos bonus. El más común es el bonus malus, que supone no cobrar dicho extra si no se consiguen los resultados marcados.
En 2013 el sueldo medio anual de un trabajador en España fue de 22.697,86 euros brutos, el 0,1% menos que el año anterior. Sin embargo, el salario más frecuente fue inferior y se situó en torno a los 15.500 euros brutos. Además, el mercado laboral penaliza a los temporales y a las mujeres.
Entrevista de El Mundo a Jaume Gurt, Director General de Infojobs: "Es cierto que todavía hay muchas empresas, sobre todo pequeñas y medianas, que están sufriendo, y donde los incrementos salariales podrían poner en peligro la supervivencia de la propia compañía. Pero las grandes empresas, donde sí se están viendo ya beneficios, deberían inyectar una pizca de ilusión al mercado."
Patronal y sindicatos han firmado el pacto salarial por el que los sueldos subirán un 1% este año y un 1,5% el que viene. Ambas partes lo han situado como un acuerdo "pegado a la realidad", y el mejor instrumento de confianza para los agentes económicos, mercados financieros y la sociedad en general.
La presión social y el deseo de ser aceptados provocan que seamos más productivos y estemos más motivados, ya que nuestro rendimiento laboral también puede afectar a nuestros compañeros. The Washington Post expone algunas investigaciones y explica casos prácticos que demuestran que los incentivos colectivos producen mayores beneficios y son más efectivos que los individuales.
Este libro es una muestra de cómo podemos encontrar un equilibrio entre creatividad y organización, para conseguir un éxito notable tanto en calidad de vida como en cuenta de resultados. Laszlo Bock, responsable de gestión de personas de Google, revela por primera vez la fórmula de trabajo que se ha convertido en leyenda global y la expone en este manifiesto rompedor acerca de nuestra capacidad para cambiar la forma en la que trabajamos y vivimos.
Uno de cada cinco parados y uno de cada diez ocupados admite haber percibido ingresos en B, es decir, sin declarar a Hacienda ni a la Seguridad Social, según un estudio sobre el mercado laboral que también revela que el 36% de los encuestados en situación de desempleo aceptaría este tipo de remuneración.
En el ejercicio de 2014 los sueldos de los directivos subieron un 10% y los de los empleados cayeron un 0,6%. Los ejecutivos mejor pagados del Ibex ganaron de media 104 veces más que sus plantillas y un total de 100 consejeros ganarón más de un millón de euros.
Un infome elaborado por la firma de Recursos Humanos Randstad muestra que el 62% de la población tiene como primera prioridad para elegir una empresa para trabajar el salario y las condiciones económicas, seguido a mucha distancia por la seguridad laboral y las perspectivas de futuro. Se valora también el buen ambiente de trabajo y la conciliación.
La retribución por cada hora trabajada en España en 2014 se queda en el 72,6% del promedio europeo cuando en 2008 era del 76,3%. Estos datos, provocados por la devaluación interna de salarios, alejan a España de la convergencia con el conjunto de la zona euro.
La planificación de las rentas del trabajo es muy importante para minimizar el efecto fiscal. Pero, esta planificación no resulta efectiva sin la propia implicación de la compañía empleadora. Es decir, las medidas que puede tomar un sujeto individual no son eficaces sin la colaboración de la empresa. El marco jurídico actual permite seguir potenciando fórmulas de retribución que han sobrevivido a la reforma tributaria. Los autores analizan las tres que consideran más significativas.
Antón Costas, Catedrático de Política Económica de la Universitat de Barcelona: "Estamos ante una recuperación esquizofrénica, tanto empresarial como socialmente. Por un lado, hay empresas que han saneado sus balances, recuperado su rentabilidad y crecen. En este caso hay margen para mejoras salariales. Por otro, las retribuciones de los altos directivos no han dejado de crecer, mientras que los salarios, en el mejor de los casos, se han mantenido."
El 'Living wage' es una propuesta de Reino Unido que consiste en el establecimiento de un salario vital para garantizar una vida digna a los trabajadores. Este salario se calcula todos los años a partir de los datos sobre el coste de la vida y a diferencia del salario mínimo, éste no es obligatorio sino voluntario.
La devaluación salarial se ceba en los que han perdido su trabajo y vuelven a ser contratados, ya que las nóminas de los nuevos contratados han caído hasta un 12% en cinco años, según datos de la EPA. Para recuperar la productividad y la competitividad, la reforma laboral apostó por la reducción del coste de la mano de obra.
La cadena estadounidense de supermercados de bajo coste Walmart ha anunciado la subida de sueldo a 500.000 de sus 1,3 millones de empleados y cambios en el sistema de turnos, tras años de quejas y huelgas por parte de sus trabajadores, muchos de los cuales aseguran vivir por debajo del nivel de pobreza.
En España las mujeres cobran un 17% menos que sus pares masculinos, aunque por sus capacidades productivas deberían cobrar un 2% más, según un informe llevado a cabo por la OIT. De este modo, si tuviera que existir alguna brecha salarial ésta debería ser a favor de las mujeres.
La reactivación del mercado laboral genera nuevas oportunidades para los directivos, que se animan a escuchar ofertas de otras compañías y salir de su zona de confort para atreverse al cambio. Los años de incertidumbre han servido para que muchos se volcaran en formarse y en adquirir nuevos conocimientos.
La mayoría de medidas de flexibilidad afectan sobre todo a la jornada laboral y se aplican en las grandes empresas, según una encuesta realizada el Ministerio de Empleo. El sector con un mayor número de compañías que han aplicado flexibilidad ha sido el de actividades administrativas y servicios auxiliares.